Se
reconoce que la retroalimentación efectiva (RA) tiene gran utilidad en los
alumnos y que involucra directamente a los docentes clínicos en su trabajo de
educación médica de grado. Los docentes clínicos involucrados parecen ser más
efectivos, productivos y creativos lo que resulta beneficioso para la relación
docente-alumno-paciente.
La
RA docente puede ser laboriosa ya que están conectados con aquellos factores que
caracterizan idealmente a un buen docente clínico y principalmente con el entrenamiento
que realiza para mantenerse como un docente clínico competente en educación
médica de grado.
En
la práctica diaria, un punto que se vuelve clave en la docencia clínica competente
es la capacidad de aceptación del docente cuando recibe RA proveniente de los
alumnos, de sus pares y del equipo de salud. Reconocer éste momento es una gran
oportunidad en el que con una mirada crítica y apertura mental uno puede re-aprender
a visualizar aspectos a mejorar y empezar a corregir otros no deseables.
Es
frecuente convivir diariamente con la aparición de emociones negativas las que
podrían ser gestionadas y asistidas a través de la denominada “Facilitación
de la RA” para el propio docente clínico.
Para esto parece necesario considerar
los siguientes aspectos:
· Superar las emociones negativas,
· Interpretar adecuadamente la RA,
· Participar en la reflexión
crítica y constructiva,
· Definir metas y Planes de acción
para poner en práctica la RA.
La
“Facilitación
de la RA” puede realizarse mediante:
· Autoevaluación asistida,
· Discusión de la RA mediante
facilitadores / capacitadores,
· Interconsultas y Reunión con
pares / expertos o mentores.
Existe
evidencia que la autoevaluación docente facilita la captación de la RA,
igualmente la discusión acerca de la RA se estimula en grupos de interés y
además, el uso de reflexión por pares mejora la práctica de enseñanza clínica. (Boerboom
T et al. How feedback can foster professional growth of teachers in the
clinical workplace).
Las
distintas estrategias empleadas para mejorar calidad en la entrega de RA por
parte de los docentes se verán directamente afectadas a su vez por la “facilitación
de la RA” que desarrolle cada docente de clínica.
Una
vez mas aparece la pregunta, ¿…por qué
nos resulta difícil entregar RA (recordemos “efectiva”) a los alumnos…?.
La
experiencia nos recuerda que algunos de los siguientes factores están
involucrados:
Estamos
muy ocupados - No ejercitamos una escucha activa - No permitimos una
comunicación bidireccional –
No
tener un espacio físico apropiado para dar RA en privacidad - Damos RA con
objetivos poco claros –
No
observamos en forma directa el desempeño del alumno frente al paciente – Deficiente
habilidad para comunicarnos - Damos respuestas pobres y defensivas - Por evitar
la confrontación - Temor a desalentar al alumno.
Un
buen comienzo para mejorar nuestra capacidad docente y superar éste escenario
es mantener un entrenamiento sobre algunas habilidades de RA que promueven
mejoras en la conducta docente. Un ejemplo de resultado satisfactorio en ésta
dirección es evaluar que para dirigir la entrega de una RA efectiva se destaca “realizar
con frecuencia la detección y discusión reflexiva de las respuestas emocionales
de los alumnos”. (Menachery
E. Proficiency in feedback skills).
Una
experiencia cualitativa interesante sobre el modo de reacción de la conducta
docente frente a la RA demostró que los resultados por debajo de los estándares
docentes esperados fueron justificados frecuentemente con estrategias de
explicación acerca de la buena enseñanza basadas en sus creencias personales y
atribuían los pobres resultados a factores externos. Pero los docentes también
admiten que los pobres resultados obtenidos son debidos a que no fueron los
suficientemente firmes con sus alumnos, incluyendo no haber hecho su mejor
esfuerzo. (van Roermund. About the ways
teachers react to feedback)
La
educación médica y las tecnologías de la información y comunicación crecen
aceleradamente a un paso similar que la incertidumbre que podrían generar. ¿…Qué estrategia ayudará confiablemente a
mejorar la capacidad de recibir y dar RA como una habilidad fundamental del
docente universitario…?
En
una experiencia cualitativa interinstitucional con 1.500 docentes
universitarios con enfoque metodológico interpretativo basada en el modelo
transteórico de cambios de conductas demostró que los docentes entrevistados
expresaron emociones negativas cuando recibían RA de otros colegas, darse
cuenta de que algo debe hacerse con o sin el apoyo de los demás y reconocer un
posible impacto negativo en los demás si no responden a la RA. Nuevamente
tratar aquellos aspectos emocionales negativos surgidos de una RA puede
estimular el progreso a través de las etapas de cambio.
El
punto de inflexión que impulsará a un docente para actuar luego de la RA
recibida y cambiar su comportamiento de enseñanza será la fuerte implicación
que desarrolle para el cambio. (van der Leeuw R. Explaining how faculty members act
upon residents’ feedback to improve their teaching performance).
José Gómez.
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